domingo, 6 de abril de 2008

hoy no me siento bien

La inercia me ganó otra vez.
El miedo al mundo y su consiguiente tristeza.
Sólo que esta vez no hay libros para saciar mi sed, y la música es tan sólo un sedante.
Nerviosa, vago entre el cigarro y la cama, que ya está limpia de perfumes absurdos.
Estoy
fisurada
necesito
una sonrisa
un abrazo
palabras llenas
cargar los vasos
y a la deriva
Esto no es un poema. Es todo lo que lloré hoy.
Por qué, me pregunto, por qué vivo día por medio.
Por qué no me canso de encerrarme.
Por qué sigo mintiendo, diciendo que estoy bien, cuando estoy confundida, y mareada, y perdida, y me siento sola porque no me dejo llegar.
Mi maldición, ser un camaleón, siempre insatisfecha conmigo misma, con quién soy, siempre queriendo ser perfecta para los demás.
Para que me quieran...
De a poco pierdo mis límites, y después me odio.
Perdón si alguien no quería saber esto y ahora lo sabe. Pero este trapito también soy yo. La caldera de lata me ha dado fuerzas, pero el pico se volvió muy angosto. Tengo que abrir la tapa para que salga todo...
Estoy triste, deprimida otra vez.
Pasa la euforia y me desinflo.
Ni un rato de paz, ni un rato de tranquilidad.
Mi tranquilidad es una baratija, y siempre me doy cuenta demasiado tarde.
Creo que me abro, y en realidad me cierro a una sola faceta, a un sólo personaje.
Acepto el cambio, también acepto un poco del teatro de la vida...
Pero quisiera quererme sin necesidad de palabras.
Lágrimas, otra vez, el olor del tabaco, la oscuridad de la lámpara.
Llega este momento, y me quedo sin color...

8 comentarios:

Verónica Medina dijo...

Lara no te juzgues así, todos tenemos momentos, no es un personaje, nadie esta las 24 horas del día pum para arriba, y el pobre que esta todo el día así seguramente ni siquiera lo disfruta.

Negra, no te me bajones, personajes, personajes tenemos todos, vos, yo, aquel, todos...
No es tan malo, uno se inclina hacia lo que lo hace sentir bien, lo que le da felicidad, lo que lo llena.
Tal vez estas dejando salir cosas, simplemente....
Lara, permitirse llorar también esta bien, yo dos por tres le derramo una lagrima a mi alohada, por mi viejo, porque lo extraño, porque sonrio a la vida, y a la gente cuando lo que quiero es un abrazo suyo.
O porque busco esos abrazo en cualquiera que este dispuesto a darmelos.

Y que se yo... Esos estados de ánimo, a veces efuoria, a veces tristeza, a veces una mezcla de ambos, es la vida. No podemos manejarlo todo...a veces es mejor dejarse llevar.

Estas en un buen momento date tiempo para disfrutarlo y todo eso que te esta faltando también va a llegar. Pero no te presiones, no te apures.

Lara dijo...

Pa, Vero, gracias...
Ahora me estoy arrepintiendo de haber posteado esto, pero no sé como se borra, jejeje...

No, fuera de joda, yo pasé de la inercia total del año pasado a la hiperactividad de este, y de no podera parar en ningun lado, todo lo quiero ya, y después me averguenzo de mi misma porque no sé ni que pasa a mi alrededor.

Y siempre, en ese momento, lloro sola, me lo trago, a lo sumo escribo un poema pero que ya lleva otra elaboración y otra tranquilidad (no es que no disfrute escribir, al contrario) y el llanto queda ahí, siempre, y estoy podrida de ese ciclo, cuando estoy bien todos se enteran, cuando estoy mal estoy sola, y ayer me desesperé...

Tenés razón en lo que me decís, pero en este momento me es difícil verlo. Hasta que no abra los ojos de vuelta...

Un abrazo, loca, gracias de veras

andal13 dijo...

Tengo que confesarte algo, Lara: vos sos una hija mía no reconocida... Esto sólo puede ser genético... A menos que seas ladrona de desvelos ajenos... Estás contando mi madrugada de domingo...
Y yo, que tuve mucho más tiempo que vos para madurar, que tengo una vida que podría clasificarse de buena y amable, también a veces me siento una nada... Y cuando pienso en todo lo que tengo, en todo lo que he vivido, en todo lo que soy, cuando hay tanta gente que no tiene nada de verdad, me hundo más y me siento mucho peor, porque qué derecho tengo yo al bajón... No me doy el derecho a la debilidad, no me doy el derecho a ser un poquito humana y derrumbarme un ratito, para levantarme después y seguirla peleando, porque los momentos de felicidad están ahí, o no están, pero la búsqueda vale la pena...
Yo lo sé, y vos lo sabés, que esto pasa... pero mientras está allí, mientras la insatisfacción está allí, a la puta, cómo duele...

Macu dijo...

Lara: muy profundo y sentidas tus letras, emociones, sentimientos. Lo mejor es dejar que la caldera hierva y que salga todo el vapor bien caliente, para después poder encontrarnos con el agua que de a poco se enfría. El agua que fluye de tu cuerpo por las lagrimas y de a poco te tranquiliza.
Esta bueno desahogarse, pero no solo quedarse con eso, sino poder hacer unos ejercicios de respiración profunda para poder armonizar tu pulso y ahí poder meditar con mayor serenidad.
Arriba! y beso

Maku

El usuario ha abandonado el sitio. dijo...

Estimada Lara: el "deber ser" es una cáscar imprudente que deberás ir sacando poco a poco de ti si quieres vivir VIVIR.
Matar camaleones lleva tiempo y dolor, pero comienzas lentamente a vivir del aire fresco y del agua clara. Fresca y clara, Lara.
A ti te gusta escribir. Escribe pues en un papel aquello que realmente desees de corazón...
Y atrévete a leerlo en voz alta.
Un abrazo bonito.

Tach

Lara dijo...

Gracias, gente, jejeje, ahora me da un poco de verguenza...

Andrea, no sé si soy tu hija pero parienta seguro, la verdad me identifico tanto con lo que me decís... hay días que cuanto más pensás en lo bueno que tenés es peor, porque te sentís por debajo de todo...

Y sí, hasta que no pasa, duele un montón...

Tach y Maku, gracias por sus palabras. En serio necesitaba decir esto, y este abrazo electrónico me hace sentir mejor...

Besotes

PD: Maku, es por el fotógrafo?

mArXelLa dijo...

Querida Lara, que he llegado tarde como de costumbre, pero por si lo lees después (ojala así sea) sólo te puedo decir que siento lo que sientes, o sea he estado dónde ahora te mueves y no es de avergonzarse, es sólo que a veces uno tiene que sacarlo, yo me lo callo por que no quiero que digan...haayy la marxella de nuevo con su depresión einconformidad de siempre, pero creeme que en ocasiones solo necesitamos un apapacho, aunque sea de lejos, yo te mando uno!

Lara dijo...

Marxella, realmente a veces lo único que falta es un aliento, pero por no decir, por no quejarnos, nos callamos la boca...

Así que tu apapacho me llegó y me hace muy bien, gracias!