miércoles, 25 de febrero de 2009

ganitas

"Mi mayor problema
es la voluntad
mejor dicho la falta de ella..."

"Disolvente", Fernando Cabrera



Bueno, se viene todo de nuevo, volvemos a las clases, se acaba el Carnaval y ainda mais. Y qué pocas ganas que tengo...

Últimamente no tengo ganas de mover un dedo, sólo quiero tirarme en la cama a mirar el techo. Si puedo ir a tirarme a una playa, mejor, pero ta, hasta ahí llego.

Estoy acostumbrada a no hacer nada, pero no a la vagancia total. No es una excusa; es que antes vivía planeando pero era incapaz de ejecutar mis planes por diferentes razones. Pero ahora que sí he hecho cambios en mi vida, lo que me pasa es que no tengo ganas.

Y quizá el que lea esto piense que todo esto es una gran pavada y que sí, todos tenemos días de vagancia, pero el tema es, ¿porqué me siento tan culpable?

¡Qué estupidez! Tuve un año recontra movido y entro a trabajar a las siete y media de la mañana siendo que no me puedo acostar antes de las doce, ¿qué hay de malo en vagar un poco antes de que se venga la locura nuestra de cada día otra vez?

Pero ya no leer un libro, ya no actualizar el blog jamás, ya no hacer nada más que dormir, y entrar a Internet para vichar el Facebook y salir (cosa que merece un capítulo aparte), ya eso me pesa. Me aburro y mucho, y no soy capaz de levantar un dedo para modificar la situación. El ocio fácil me está matando. No soy capaz de seguir una noticia que me interesa, de prestar atención cuando escucho la radio, de salir a caminar (teniendo el Prado a diez cuadras)...

Me encanta poder disponer de mi tiempo, lloro todo el año por tener tiempo. ¿Tiempo para qué? Después lo derrocho, o esa impresión tengo.

A su vez pienso en que la vida continúa y quiero seguirla... Pero no me quiero apurar, no tengo ganas...

Quién sabe... dentro de unas semanas no voy a tener tiempo para respirar otra vez... quizá sea hora de dejarme de culpabilidades y disfrutar del hecho de poder no hacer absolutamente nada. También para ver que hay muchísimas cosas para hacer allá afuera.

Nota: este post es fruto de mi aburrimiento y mi sincera intención de mantenerme al día con la pobre caldera de lata que ya se estaba oxidando. No me hagan mucho caso...

6 comentarios:

andal13 dijo...

Ah, no sabés cómo te comprendo... He pasado períodos así, en los que me abruma la culpa... Desear todo el año poder tener TIEMPO LIBRE para hacer mil cosas y que cuando llega ese tiempo terminás haciendo nada de nada de nada...
Qué sé yo, son etapas... ¿Ya pasará???

andal13 dijo...

Ah, me olvidaba... buenísima la estética, y la nueva foto!

Lara dijo...

Yo no sé a que responde esta vagancia. Y menos la cul`pabilidad porque si no tengo ganas, bueno, no tengo ganas!

Así que estamos en la misma...

Gracias por el elogio! ya necesitaba un cambio de look, jejeje...

Oruga Viajera dijo...

Lara, cómo la entiendo. Estoy en la previa de un año que todavía no sé cómo será, pero supongo que movido. Y acá yo, haciendo nada. Debería hacer unas cosas, pero me cuesta concentrarme...

En fin, yo creo que la cosa es disfrutar del ocio y listo! No hago nada, listo, qué bueno.

Bueno saludos.

PD: Recién vuelvo de Uruguay, y estuvo hermosooo! No quería volver...

Lara dijo...

Si, yo creo que hay que disfrutarlo nomás... estamos acostumbrados a que el tiempo se utiliza, y el tiempo sólo existe, sólo pasa...

Lara dijo...

Y me alegro de que te haya gustado Uruguay! Siempre es lindo escuchar eso